AGRESIÓN DE GATOS A PERSONAS parte I
La agresividad es un comportamiento que se puede observar en el gato de manera natural y que cumple distintos objetivos comunicativos y de defensa de los recursos y del territorio. Pero llevado al entorno doméstico y a la vida en cautividad puede representar un problema grave para el propietario.
De los problemas de conducta que podemos observar en nuestra mascota esta ocupa el primer lugar.
¿Por qué ocurre?
La mayoría de las veces el propietario no es capaz de identificar las señales previas a una interacción agresiva.
Principalmente por falta de información sobre el comportamiento de los gatos, sus necesidades y claramente su manejo. Por ejemplo: manipulación forzada, o acercamiento indebido.
Las categorías en las que podríamos agrupar las agresiones de gatos hacia personas serían fundamentalmente cuatro:
• Agresión defensiva en respuesta a una amenaza.
• Agresión en el juego/ predatoria/ por demanda de atención.
• Agresión por frustración.
• Agresión como consecuencia de una enfermedad.
¿Qué debemos saber de nuestro gato?
Tienen gran despliegue de la conducta de caza, poca tolerancia al estrés y respuesta agresiva ante una amenaza percibida si no existe la posibilidad de huir, escalar o esconderse y permanecer inmóvil.
Además, existen otros factores que debemos tomar en cuanta como:
Los defectos en la socialización temprana
La cría sin progenitores y/o hermanos de camada
La obligada convivencia de más de un individuo en un espacio limitado
La carencia de recursos suficientes
El reducido enriquecimiento ambiental
Todos estos factores condicionan el comportamiento del gato llevando en múltiples ocasiones a comportamientos agresivos.
ALGUNOS DATOS
Parece ser que los gatos que conviven con otros individuos de su misma especie en un hogar, son menos propensos a manifestar agresividad hacia las personas
Los gatos adquiridos en tiendas suelen presentar más problemas de comportamiento.
Las técnicas de enriquecimiento ambiental son esenciales para proveer a los gatos de un ambiente adecuado, estable y seguro donde poder desarrollar sus necesidades de comportamiento y estar protegidos de elementos que les produzcan miedo y estrés. Estas medidas incluyen enriquecimiento físico, social, sensorial, ocupacional y nutricional.
